El estadio Mineirao, en Belo Horizonte (Brasil), donde la selección de fútbol de Brasil recibió la humillante derrota por siete goles contra uno por parte de la selección de Alemania, ese estadio se abastece con la energía del sol.
El complejo deportivo (donde el 21 de junio pasado la selección argentina le ganó por 1 a 0 a la de Irán) tiene unos 6.000 paneles solares que revisten la cubierta del estadio y generan una potencia de 1,5 MW.
El “Mineirao”, que tiene una capacidad para 62 170 espectadores, consume el 10% de la energía proveniente de los paneles solares. El resto, se distribuye en unas 743 casas ubicadas en los alrededores.
Los otros estadios de fútbol con el mismo sistema de generación de energía limpia son: el Estadio Mané Garrincha de Brasilia, el Estadio Maracaná en Río de Janeiro y el Itaipava Arena de Pernambuco.
