Un decreto emitido por el Gobierno Nacional permitiría el ingreso a la Argentina de “residuos” provenientes de otras regiones del mundo. Solo en el 2016 se generaron más de 2.000 millones de toneladas en el mundo y el problema es qué hacer con ellos. Según denuncian ambientalistas, con este decreto “nos vamos a convertir en el basurero del mundo”.